Falafel

Las mejores recetas de falafel

Falafel de garbanzos

Falafel de garbanzos

Todo israelí tiene una opinión sobre el falafel, la comida arabe por excelencia que se sirve dentro de pan de pita.
Hay muchos restaurantes árabes en los que se sirve este plato, pero lo mejor es elaborarlo en casa.

El primer problema del falafel, es que las croquetas pueden quedar muy pesadas y aceitosas si no se fríen bien. Para que queden ligeras y sabrosas, hay que esperar a que el aceite esté bien caliente. Para saber si está caliente, se puede añadir un trocito de pan y esperar a que empiece a freírse.

Una vez doradas, las sacamos a un papel de cocina para que absorba el aceite sobrante.

El falafel resulta una comida barata, rica en proteínas, y a la gente le gusta. Resulta apto para veganos y vegetarianos.

Estos ingredientes son para hacer unas 20 croquetas:

  • 1 taza de garbanzos secos
  • 1/2 cebolla grande, picada
  • 2 cucharadas de perejil fresco finamente picado
  • 2 cucharadas de cilantro fresco finamente picado
  • 1 cucharadita de sal
  • 4 dientes de ajo
  • 1 cucharadita de comino
  • 1 cucharadita de levadura en polvo
  • 4-6 cucharadas de harina
  • Aceite vegetal para freír
  • Tomate en rodajas como acompañamiento
  • Cebolla picada como acompañamiento
  • Pimiento verde como acompañamiento
  • Salsa de tahini
  • Pan de pita

Preparación:

El día antes, ponemos los garbanzos en un recipiente grande cubiertos con agua fría para que se ablanden durante la noche. También se pueden utilizar garbanzos cocidos y escurridos.

Al día siguiente, escurrimos los garbanzos y lo ponemos en una picadora, junto con la cebolla, el perejil, el cilantro, la sal, el ajo y el comino.
Lo trituramos todo hasta que la mezcla esté hecha puré.

Incorpora la harina y la levadura en polvo y vuelve a triturarlo. Lo que queremos es añadir suficiente harina para que la masa no se pegue en las manos cuando la hagamos una bola.

Ponemos la masa en un recipiente, lo cubrimos y lo introducimos en el frigorífico durante varias horas.
Cuando la masa esté bien firme, cogemos una pequeña cantidad y hacemos una bola del tamaño de una pelota de ping pong. Vamos haciendo bolas hasta acabar con toda la masa. Si vemos que la masa se nos pega en las manos, podemos enharinarnos las manos.

Ponemos a fuego fuerte una sartén grande con suficiente aceite para freír las bolas. Hay que esperar a que el aceite esté bastante caliente, podemos añadir un trocito de pan para saber como está la temperatura. Cuando empiece a freírse, añadimos las bolas.

Dejamos que se frían unos minutos por cada lado, hasta que se doren.
Una vez fritas, las pasamos a un plato con papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.

Para montar el plato, rellenamos la mitad del pan de pita con las croquetas de falafel, unas rodajas de tomate, cebolla y pimiento verde. Añadimos el tahini a nuestro gusto y a disfrutar.

El falafel se puede acompañar de un primer plato ligero, como purés, cremas o una ensalada verde.

Nota.

El tahini es una pasta aceitosa elaborado con semillas de sésamo molido. Para hacer una salsa más líquida, podemos añadir un poco de agua a la pasta.